Autor: Victor Hugo Bustamante
Ironman Arizona 2018
Me preparé duro, entrené cerca de 8 meses para este evento, era mi regreso al full Ironman después de 3 años de enfocarme a solo maratones y medios Iron… aquí está mi relato.

Saliendo del agua a 16oC
El agua fría y obscura
La natación fue muy dura por lo frío del agua, aproximadamente 16°C, entramos al agua de 2 en 2 por lo que arranqué 20 minutos después del disparo de salida, la visibilidad de Río Salado en Tempe es prácticamente cero, no se puede ver ni la mano cuando se hace el jalón de la brazada, el sol pegaba de frente por lo que tampoco se podía hacer una buena orientación con nado de río, no me quedó otra que tratar de seguir la muchedumbre y orientarme un poco con las boyas de curva o retorno. El wetsuit ayuda mucho para contrarrestar el frío, pero no se puede cubrir la cara por lo que salí del río congelado de cara y pies.

Rodando 180 km a muy buen ritmo
Una bici ideal
Me fui “rapidito” a la carpa para quitarme el wetsuit y ponerme la indumentaria de ciclista, arranqué muy seguro de mi mismo y como en cada Ironman disfruté al máximo rodar, es mi disciplina favorita y siempre encuentro algo bonito al desempeñar ciclismo, mi tiempo en los 180km de ciclismo sobrepasa por 6 minutos las 6 horas y eso me hace sentir motivado y confiado que puedo tener un buen desempeño en mi Ironman número 6 (666 el número diabólico jajaja).
Empecé la carrera a un trote de aproximadamente 6:30 el kilómetro y me sentía con fuerza y confianza para enfrentar bien el maratón, pero…. Cometí uno de los errores más garrafales que puede hacer alguien cuando desempeña un Ironman: PROBAR ALGO NUEVO.
Al kilómetro 10 siento nauseas y decido provocarme vómito, continúo corriendo, pero la náusea no para, al kilómetro 16 me encuentro a Yolix y conversamos:
– ¡Toma un Dramamine para superar la náusea!
– ok
– No, mejor toma dos….

Empezando el maratón
Empieza el sueño
Nunca había tomado un Dramamine en competencia pero obedecí sin pensarlo mucho porque la náusea era demasiada e imaginé que sería un buen remedio… a los 10 minutos siento que el Dramamine hace efecto y se me empieza a quitar el asco, en ese momento el sol empieza a meterse y me deleito con los tonos naranjas y rosas del atardecer de Tempe, pero además empiezo a sentir un sueño incontrolable, estoy corriendo y tengo una gran necesidad de dormir, no puedo mantener los ojos abiertos, decido acostarte en un pastito al lado del camino y tomar una pequeña siesta, pasan aproximadamente 7 minutos y me despierto con ganas de seguir corriendo, ya no tengo náusea pero a los 20 minutos tengo otra vez un sueño incontrolable, vuelo a repetir la dosis de acostarme a un costado y dormir, consumo otros 5 o 6 minutos durmiendo, retomo la carrera nuevamente… me encuentro nuevamente con mi porra y les digo que necesito dormir otros 5 minutos, me siento en una banca y repito mi dosis de sueño, piden ayuda a una prima doctora y recomienda que tome un red bull o cafeína, ya no obedezco, me vuelvo a incorporar y sigo corriendo…
Para no hacer larga la historia solo diré que paré 7 veces a tomar mis pequeñas siestas, la última ocasión fue en el km 28 y les dije a los voluntarios:
– I’m ok, I just going to be here doing some meditation.
Los voluntarios me dejaron “meditar” al lado de la mesa de hidratación, me dormí otros 8 minutos y me desperté para retomar la carrera y enfilarme sin más paradas de sueño, hace mucho frio pero me enfilo entusiasmado a la meta, en el último kilómetro acelero el paso y me quito la sudadera para que en la meta se vea mi trisuit Quarzo.

Celebrando en la meta
La meta
Me encuentro con mi Peque a 200m de la meta, me saluda sonriente y acelero un poco más para cerrar con buena energía sobre la alfombra roja, escucho que el narrador dice por el altavoz: “Victor Hugo…. You are an Ironman” y al momento de cruzar la meta brinco feliz para celebrar.
Creo que ha sido mi peor tiempo en un maratón de Ironman… bien dicen que ningún Ironman es fácil y siempre surgen cosas inesperadas, pero ahora puedo decir que padecí por no respetar el consejo que tanto insisto con mis atletas: NO IMPROVISAR.
Después de esta experiencia no quiero volver a improvisar, y solo diré que terminé muuuuy #contentotecelebrando con mi Yolix tomando champagne por nuestro aniversario de boda #23.
Comparto con ustedes algunas fotos de evento
#contentote6VecesIronman #QuarzoPower #QuarzoTriClub